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30/Jun/2020

3 dinámicas para manejar el estrés en niños y niñas

No es un secreto para nadie que los niños suelen caer en períodos de estrés o generar situaciones tensas dentro de la convivencia familiar. Los disgustos y arrebatos no son exclusivos de los adultos, sino de los humanos en general y ellos justamente están aprendiendo a manejar estas situaciones de la mejor forma.

Si bien están aprendiendo, muchas veces no entienden del todo qué es lo que están haciendo mal y cuando intentas explicar puedes complicarlo más. La idea es poder manejar estas situaciones dentro de su propio territorio con dinámicas lúdicas o 100% prácticas. 


Aquí, 3 dinámicas para manejar el estrés en niños:

Dinámica 1: ¡Tiempo fuera!

Se trata de una dinámica muy aplicada y recomendada por psicólogos infantiles que consiste en llevar al niño o niña a un lugar donde pueda reflexionar sobre qué hizo mal sin distracciones. La idea es que lo hagas luego de haberle explicado al pequeño en qué consiste esta dinámica y advertirle que su comportamiento es lo que detona hacer un “tiempo fuera¨. 

Probablemente estés trabajando desde casa y leíste nuestro blog anterior  ̈ Cómo sobrevivir a la jornada laboral y disfrutar de tiempo de calidad con los hijos¨ donde aconsejamos distintas actividades para mantener a los pequeños de casa entretenidos. Aunque, si bien pueden estar entretenidos o bajo el cuidado de un tutor digital, eso no descarta la posibilidad un momento tenso en el que debas intervenir. 

Muchas cosas pueden motivar un mal comportamiento: estrés, disgusto, llamar la atención. Lo ideal es estar lo suficientemente atentos para preverlo; si solo hacemos una advertencia para poder seguir con nuestras actividades, estaremos derogando la necesidad de poner pausa y atender la situación. 

La idea es que tú también te tomes un momento para evitar que se siga repitiendo la conducta inadecuada y puedas enfrentarlo con tranquilidad y generar resultados positivos. 

La magia del tiempo fuera es que todos en la casa se ponen en pausa para atender una situación importante: la educación del hijo o hija.

Dinámica 2: Juego de ecos

Si hay más de un niño en casa es probable que en algún momento del día haya un momento tenso entre ellos o con otro integrante de la familia. Es algo absolutamente normal que se presenta en todas las familias. En Guía infantil recomiendan este divertidísimo juego de ecos para reducir el estrés de niños y padres.

¿En qué consiste?

El eco es un fenómeno muy divertido e impresionante para muchos niños. Podemos usarlo para hablarles de la resonancia de nuestras acciones con los demás. Si actúa, por ejemplo, con agresividad o altanería con su hermano, probablemente este actúe de la misma manera de regreso.

Este juego se complementa a la perfección con la dinámica del ¨tiempo fuera¨. ¿El niño está siendo grosero o agresivo con alguien de la familia? Recurre al tiempo fuera y busca unas hojas para poner en práctica el juego de ecos, que consiste en escribir los nombres de los integrantes de la casa en sentido vertical, la relación que quieren tener con él y lo que dará para que eso suceda en sentido horizontal. 

Se debe ver de esta forma:

Hermano | quiero una relación divertida | le prestaré mis juguetes más seguido. 

Luego debes pedirle a tu hijo o hija leer lo que escribió y hacerlo repetir varias veces hasta memorizarlo. En algún momento le surgirá la pregunta: ¨¿mi hermano qué me dará?¨ (para seguir con el ejemplo de arriba). La respuesta es sencilla y poderosa: ¨te devolverá todo lo positivo que le irás dando, así como el eco te devuelve las palabras que le diste en un primer momento¨.

Estamos seguros que nunca se le olvidará. 

Dinámica 3: Mindfulness para niños y niñas

Este video de Gemma Sánchez explica muy bien cómo puedes incentivar a tus hijos a practicar la conciencia plena con sencillos ejercicios como respirar lentamente y rozar las manos mientras imaginan que están creando una esponja.

Muchas veces eres testigo de cómo tus hijos empiezan a protestar por todo o hacer las cosas con desgano hasta perder la paciencia. Sea donde sea, debes detenerte y detenerlos para hacer los ejercicios de mindfulness. Así podrán tranquilizarse y vencer el estrés antes de caer en una situación tensa e incómoda. Luego de varios intentos en conjunto, ellos mismos lo empezarán a poner en práctica sin tu intervención. 

Conclusión

Existen muchas dinámicas para manejar el estrés en niños, pero el requisito fundamental para que estas funcionen es la atención plena. Debes estar atento y demostrarle que estás ahí para ayudarle por más que se equivoque o se deje arrebatar por las emociones. 

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