3 iniciativas mundiales para controlar el coronavirus en la vuelta a clases

¿Qué han hecho China, Francia e Israel en su retorno al colegio? ¿Cómo resguardan a sus niños y niñas de un posible contagio? Te lo contamos en el siguiente blog.

Tarde o temprano, los niños y niñas tendrán que volver a clases y enfrentarse a lo que llaman “la nueva normalidad”. Para esto es clave que hables desde ya con tus hijos sobre este nuevo escenario y les expliques los riesgos. 

Este retorno se debe hacer tomando diversos resguardos. ¿Cómo lo han hecho diversas naciones para retomar su rutinas y minimizar los riesgos de contagio?

La Organización Mundial de la Salud recomendó ciertas medidas para la vuelta a clases, ya que hay que valorar los daños derivados de tener los colegios cerrados . Entre ellas, se destaca la creación de horarios para el lavado de manos, saludar sin contacto, difundir los síntomas del virus, desinfección diaria de todos los espacios del colegio, evitar el contacto físico, entre otras.

3 iniciativas mundiales para controlar el coronavirus en la vuelta a clases

China

Después de varios días sin registrar fallecidos por COVID-19, China volvió gradualmente a las clases presenciales para niñas y niños. Sin embargo, las medidas son estrictas en las escuelas. Por ejemplo, además de usar todos los artículos de protección individual y respetar el distanciamiento social, también deben desinfectar sus zapatos al entrar al recinto, botar la mascarilla que usaron en la calle y lavar sus manos antes de entrar a la sala. Asimismo, les desinfectan la ropa y les toman la temperatura. Por último, una vez dentro de la sala de clases, deben seguir usando mascarilla y los escritorios suelen tener pantallas para delimitar el espacio. 

Ahora, en el caso de los niños más pequeños deben usar sombrero con un alerón que marca una distancia de un metro y medio con cualquier persona. De esta manera, no hay que recordarles la distancia que deben mantener. 

Francia

A mediados de mayo, Francia abrió 86% de la escuelas del país. Sin embargo, ese regreso no se llevó a cabo sin polémica, Sobre todo en un país donde hubo más de 28 mil muertes por el coronavirus. Dicho sea de paso, el primer ministro francés Édouard Philippe decretó que la vuelta a clases era voluntaria y no obligatoria. De hecho, muchos niños aún permanecen en sus casas.

Por eso, las medidas de prevención son altas en los recintos escolares: las salas disminuyeron notoriamente la capacidad de alumnos, todos llevan mascarillas, los niños tienen delimitado donde pueden ponerse si es que hay hacer una fila, y deben jugar manteniendo la distancia. 

Asimismo, los profesores deben supervisar cuidadosamente que los niños se laven las manos todas las veces que sea necesario. Por otro lado, los alumnos deben asistir en horarios diferenciados para que no haya aglomeraciones. 

Según manifestaron las autoridades de las asociaciones de profesores, lo más complejo es que deben impedirles a sus alumnos vivir su vida de niños.

Israel

A pesar de la oposición que hubo de algunas ciudades al levantamiento de la cuarentena, Israel volvió gradualmente a clases. Los primeros en regresar fueron los alumnos de primaria y secundaria. 

Como en otros países, el uso de mascarilla es obligatorio. Pero algo en lo que han hecho especial hincapié en Israel es en respetar la distancia. Los niños no pueden jugar en grupos durante los recreos y esto debe respetarse tajantemente.

Sin embargo, aquí la asistencia tampoco es obligatoria y en el caso de los profesores, quienes tengan más de 65 años pueden acogerse a una baja. 

Conclusión

Las iniciativas mundiales para controlar el coronavirus son relativamente similares. Lo importante es que los padres y madres también preparen a sus hijos para este nuevo escenario en el que los niños y niñas no podrán comportarse como siempre lo hacían. Deben aumentar las medidas de higiene y seguir las instrucciones que las autoridades escolares les indiquen. Pese a que aún no existe un alto nivel de contagio en los más pequeños, ellos pueden ser un importante vector y traspasar el COVID-19 a sus seres queridos.